martes, 1 de julio de 2008

Tantas veces me mataron…


Había pensado en no escribir nada para esta fecha, dejarla pasar, recordar la partida del general en silencio. Después de todo, el 1º de julio se recuerda la muerte oficial de Perón, pero el general viejo y cansado que se iba para siempre, había muerto ya tantas veces.

Una parte de el se fue con Eva, seguro. ¿No notaron que sus ojos brillaban con melancolía después del fatídico 26 de julio?

Lo volvieron a matar con cada uno de los descamisados que cayó bajo las bombas asesinas del 16 de junio. Con cada pibe de ese colectivo calcinado.

Murió ese septiembre del 55, cuando en un acto de grandeza, no quiso que se derramara más sangre argentina sobre este suelo bendito, y con cada bala que recibieron, heroicos y valientes, el General Juan José Valle y sus patriotas, en defensa de la constitución.

Con cada fusilado que se negaba a olvidar la Argentina plena de trabajo y dignidad, por cada militante que cayó luchando por el retorno de la democracia.

Hasta ese viejito que la historia disfraza de bueno lo mató un poco, cuando frustró su regreso al país, haciendo volver su vuelo desde Brasil.

¡Tantas veces, en España, habrá muerto! Viendo obras colosales demolidas por el odio, no a él, a lo que representaba; los humildes y trabajadores de su patria.

Murió en el salvaje odio de Ezeiza, con cada compañero caído, y con cada mentira contada, después, para disfrazar los hechos.

Las balas que acribillaron al flaco Rucci, fueron para matar al general.

No alcanzó con tantas muertes, el odio seguía latente, lo dejaron sin manos, le robaron su sable; lo volvieron a matar con cada muerto que se cobró la investigación sobre este aberrante hecho. Una página macabra, tanto como el vergonzoso destino del cuerpo de Evita.

La última vez que lo vi morir, lo llevaban a su morada final. Pero los medios solo mostraron los tiros y la sangre. Nadie mostró el camino bordeado de aquellos militantes que fueron a saludar al viejo general.

Murió con cada traición, y volvió tantas veces cómo lo mataron.

Estoy convencida que la única muerte posible es el olvido, la única definitiva e inapelable, la que no tiene retorno. Por eso, finalmente, decidí recordar al general a 34 años de lo que los ilusos suponen, que nos dejó para siempre, pero él sigue con su blanca sonrisa y su guiño cómplice dándonos sus magistrales clases sobre política desde los libros, los viejos y enormes discos, los casetes, los discos compactos y ahora los DVD. Nadie pudo bajarlo de su caballo pinto ni del perpetuo amor de su pueblo. Él sigue siendo el único general del pueblo.


Natalia Jaureguizahar

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente, emocionante.

¡Viva Perón, carajo!

EMPRENDIMIENTOS PROFESIONALES dijo...

Mis distinguidas felicitacioines por tan sincero homenaje que proviene de compañeros compromentidos con la causa peronista, saludos
Movilización Peronista
Javier Taillant

Anónimo dijo...

Grande compañera Peron fue el presidente mas inteligente y bueno de Argentina.
Aguante Peron
Dante

Anónimo dijo...

Peron fue el mejor y es de todas.
¡querido general recogimos tu fusil y continuaremos tu lucha¡
Viva Peron Viva Evita Viva la Patria

Agrupación Arturo Jauretche dijo...

¡Viva!

F y PP dijo...

Estimada Nati no tenemos el gusto de conocerte pero hemos leído tu hermoso blog y nos afloja un lagrimón...una persona con tu sencibilidad social, hace honor a nuestro movimiento justicialista y a tan prestigioso historiador (A. jauretche)nuestra causa Peronista por encima de todo y de todos. , VIVA LA PATRIA, PERÓN Y EVITA!!! PP-"CENTRO DE ESTUDIOS EVA" PERÓN

Agrupación Arturo Jauretche dijo...

Hola compañero: Gracias por tu comentario. Creo que te conozco, ¿Estás en Venado?, un abrazo. Vasca

Amillius dijo...

Si estoy en Venado y suelo charlar a veces con Roberto Capdevila, hoy le publicamos la carta en nuestro blog, por que nos pareció barbara ya la habiamos leído en el informe y nos la hicieron llegar compañeros para que la publiquemos:www.centrodeestudiosevaperon.blogspot.com

Agrupación Arturo Jauretche dijo...

Muchas gracias, PP. Llama uno de estos días, nos juntamos a charlar un rato