martes, 26 de julio de 2011

A EVITA























Talló su alma en madera de pobreza

y convencida, arremetió a la nada

con la sangre encaramada a la tristeza

y el coraje rebalsando su mirada.


Halló el amor desbrozando la maleza

de un pueblo harto, y un líder de asonada,

y sin pensarlo, entregó fuerza y belleza

a la epopeya de ser abanderada.


No la pudieron la insidia y la vileza.

Para el Pueblo fue una tromba disparada

reivindicando al humilde y al “cabeza”.

A puro ardor, de la noche hizo alborada.


Fue pan para el pobre, fue miga y corteza.

Fue tigresa de su hombre en la parada,

aleluya esperanzada del que reza,

de la mujer emblema, del niño hada.


Muerta, hoy es mito. Pasó por la certeza

del querer devuelto, aunque también fue odiada.

El odio perdió. Su altar en tanta pieza

dice que no murió. Ahora es alada.


LEON GUINSBURG

viernes, 1 de julio de 2011

Hoy es 1º de julio


"...Toda lucha es grata y llevadera, si el objetivo es alto, heroicos los jefes y fieles los compañeros”.
Evita

¡Salud, mi General!

¡Salud al hombre del siglo, al hombre del bicentenario, al hombre del destino...!

¡Salud a aquel que fundó la nueva Argentina en la que los niños eran los únicos privilegiados, las cárceles estaban prácticamente vacías, al Presidente se lo llamaba “primer trabajador” y las Primeras Damas vivían y morían trabajando y dando ejemplo!

¡Salud al heredero de San Martín, Artigas y Bolívar en el largo trabajo de unir a la América del Sur!

¡Salud al fundador de los complejos hidroeléctricos, los polos petroquímicos, los altos hornos siderúrgicos y los caminos que hicieron grande a la industria nacional!

¡Salud al creador del IAPI y del Estatuto del Peón de Campo que pusieron a nuestra producción agropecuaria entre las mejores del mundo!

¡Salud mi General! y gracias por la Constitución de 1949, no superada aún en la legislación de ningún lugar del mundo pero negada por los burócratas argentinos!

¡Salud mi General y gracias por tu carta a los pueblos y gobiernos del mundo de 1972, en la que sentaste doctrina respecto del medio ambiente y la ecología!

Salud al que arrebató a los ingleses, el Banco Central, los Ferrocarriles y la Administración de Puertos, entre otras cosas.

¡Salud al indiecito Juan Sosa que supo expropiar tierras a la oligarquía para entregárselas a nuestros hermanos, los indios!

¡Salud al fundador del Movimiento Peronista en el que se refugian todos, incluso para desde allí, negarte!

¡Salud al padre de la Argentina moderna!

¡Salud al resistente de más de 18 años de exilio, sin subsidios dorados, ni Comisiones de Derechos Humanos de la OEA para defender a sus leales!

¡Salud al resistente de siempre; fusilado con balas de silencio o de mentiras!

¡Salud General venerado por los abuelos cuyos derechos elevaste a rango consitucional!

¡Salud Cristiano verdadero, odiado por los fariseos de ayer y de siempre por haber dado de comer al hambriento y de beber al sediento!

¡Salud al fundador de la Revolución Social Justicialista, realizada en paz, sin fusilados por derecha o por izquierda y con los trabajadores disfrutando de la mitad de la renta nacional y de la plena ocupación!

¡Salud al que enfrentó a los imperialismos y a sus alcahuetes locales, sin medir las consecuencias y por eso le serrucharon las manos!

Somos el amor de Evita y su sólida convicción Peronista por conciencia nacional, por procedencia popular, por convicción personal y por apasionada solidaridad y gratitud al pueblo argentino…

Somos el Pensamiento Nacional militado desde siempre, para quienes la Patria no ha sido ni será un negocio.

Somos los jóvenes, aquella “maravillosa juventud” que se metió en la historia –negada– a punta de coraje y armados de la sólida verdad que empezaba y empieza con P de Patria, de Pueblo y de Perón. Aquella juventud que sigue sintiéndose orgullosa de haber tenido un jefe como vos. Aquellos jóvenes que no pedían nada porque lo querían todo.

Somos los mismos; los de cada 17 de octubre y cada 17 de noviembre. Los de aquel 20 de junio de la alegría apagada por las balas gorilas. Los que el 1º de mayo de 1974 fuimos con nuestros hijos y nuestros padres a agradecerte a una sola voz: “¡Conformes, General!”

Somos los que apoyamos a tus tres gobiernos hasta el último aliento, hasta el último segundo y vivimos para reivindicarlos. Siempre. Y apoyamos hoy a la lucha contra las patronales del campo; y la recuperación de los fondos que querían robarnos las AFJP; y la Nueva Ley de Servicios Audiovisuales, y la recuperación de Aerolíneas Argentinas y AySA; y la asignación universal por hijo; y toda lucha que implique la continuidad de la Revolución Social Justicialista.

Y somos los que no olvidamos, los que creemos profundamente en la Memoria, la Verdad y la Justicia y por eso recordamos que los años más felices fueron peronistas y por eso seguimos queriéndote y sosteniendo tu ideario como el de la auténtica reconstrucción y liberación nacional.

¡Salud padrecito de los pobres!

¡Salud querido General!

¡Salud Compañero en Jefe y hasta cada lucha!

Roberto Surra

Peña Roberto Heredia. Tres de Febrero